ESCLATA-SANGS AMB LLONGANISSES
NISCALOS CON LONGANIZAS
Después de las primeras lluvias del otoño y alimentados por los rayos del sol, es tiempo de níscalos.
En mi ciudad, Alcoi, se llaman esclata-sang, ya que los de la sierra de Mariola, el interior de los níscalos suele ser rojizo, por eso que al partirlos parece que estalle la sangre (esclata-sang) de ahí su nombre.
Esta es una receta heredada de la madre de mi amiga Mariló, es decir, cuanto menos nos remontamos a principios del siglo XX.
Triunfa como aperitivo o plato de cena.
INGREDIENTES PARA DOS PERSONAS:
- Ocho níscalos.
- Cuatro longanizas.
- Seis dientes de ajo.
- Pebrella.
- Pimienta negra.
- Sal yodada.
- Aceite de oliva virgen extra.
ELABORACIÓN:
En primer lugar cortamos los níscalos y las longanizas en dados, dejando los dientes de ajo enteros.
Lavamos varias veces los níscalos con agua y limpiamos de alguna impureza.
Una vez bien lavados los níscalos, los reservamos, salpimentamos y espolvoreamos con un poco de pebrella sobre ellos.
En una sartén añadimos un poco de aceite, y sofreímos la longaniza y los dientes de ajo.
A los cinco minutos cuando estén bien sofritos la longanizas y los dientes de ajo, incorporamos los níscalos y seguimos cocinando, a fuego lento, hasta que se evapore la mayor parte del agua de los níscalos.
Y ya está, emplatamos, una buena barra de pan y a disfrutar.
Aunque parezca un plato muy simple, os sorprenderá en el sabor, ya me comentareis.
Buena pinta
ResponderEliminar